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viernes, 1 de enero de 2016

El 2015 fue extraordinario, y es gracias a Dios

Desde enero hasta ayer, 31 de diciembre, jamás pude dejar de ver a Dios en TODO.

Tengo un trabajo en el cual puedo ejercer lo que estudié. Compañeros de la gran siete (tranqui jaja). Un jefe que me banca y me da confianza en todo lo que hago y muchas ganas de seguir aprendiendo.

Me recibí como Técnico en Comunicación Social. No pensaba hacerlo este año por el tiempo y la cantidad de materias que debía dar. Pero Dios me dio fuerzas y ánimo para rendir y aprobar todos los parciales y los 13 finales que di en diciembre. Todavía me acuerdo las veces que quise dejar la carrera y Dios mismo me decía que vaya a orar y ahí me decía lo que Él iba (y va) a hacer conmigo, entonces yo iba a clases y lograba permanecer. Hasta que llegó el momento de dar la última materia y ahí quedó todo demostrado. Dios es fiel.

Definitivamente Dios me dio los mejores amigos que alguien pueda tener. Son pocas personas, pero las suficientes que necesité. Me alentaron, sostuvieron, permanecieron y bancaron en TODAS. Me rayé, los dejé, me enojé, no me entendieron, no los entendí, me perdonaron, los perdoné y hoy son una gran parte de mi vida. Dios me bendijo con sus vidas, son un tesoro que no tienen precio.

¡Mi familia! sin dudas es el primer lugar donde Dios me mostró su amor. Mis viejos... Personas con TANTO amor que nunca vi. Me dieron y dan TODO. Los hice renegar, los cansé, los deshonré, pero ahí siguieron. Firmes.
Me acuerdo una mañana cuando oraban por mi, y al levantarme papá me abrazó y fue el momento en el que más claro vi a Dios dándome un abrazo. Fue tan puro y lleno de paciencia que no me lo voy a olvidar en toda mi vida. Sin dudas, Dios antes de elegirme a mi, los eligió a ellos.
¿Mis hermanos? La reliquia más grande que alguien pueda tener. Nico y Tomi son el equipo perfecto que se necesita en cualquier lugar. Dios está en ellos.


Ya con alguna lágrima, hoy disfruto todo el bien que no merezco. Tengo algo en claro. Dios no se cansó de mi. No se cansa. Tampoco se va a cansar NUNCA.

El 2015 fue un gran año, y es gracias a Dios. Él es mi Amigo, mi Consejero, mi Papá para siempre y mi Paz.



¡GRACIAS DIOS POR EL 2015!

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